Muchas veces suele pasarnos que por algunas situaciones de nuestra vida decidimos alejarnos de nuestro Señor y nuestro Padre, cualquiera que sea la razón, él la conoce, si hoy estas arrepentido(a) de alejarte del Señor he aquí te traemos una oración para reconciliación con el Señor. Él permite que pasemos por situaciones que son necesarias para madurar espiritualmente. Si estas leyendo estas palabras es porque quieres reconciliarte con tu Creador, y en gran parte has aprendido que sin él no somos nada.
Haz esta oración para reconciliación con el Señor y vuélvete a él, para que disfrutes de la vida en abundancia que el promete a los que le creen y le sirven de lo más profundo de sus corazones.
Oración para reconciliación con el Señor en intimidad
Querido Señor Jesús, por tu sacrificio en la cruz, tu venciste el pecado y la muerte; te pido que perdones todos mis pecados, especialmente por aquellos que han permitido cualquier forma de enfermedad o dolencia entre en mi cuerpo y dañe mi salud. Por ello te pido que envíes el don de convicción del Espíritu Santo y que resplandezca la luz de la verdad en los rincones más profundos de mi alma, para que yo pueda hacer un acto completo de contrición ante ti ahora.
Señor Jesús, por favor perdóname por todos mis pecados, especialmente por cualquier pecado consciente e inconsciente. Te pido perdón por todas las veces que no te he hecho Señor sobre mi vida. Perdóname por poner falsos dioses delante de ti; por postrarme y servir a los ídolos; por tomar tu santísimo nombre en vano, te pido perdón por no honrarte como te lo mereces.
Perdóname por fallarte y no amarte con todo mi corazón, espíritu, alma, y cuerpo, por no amar a mi prójimo como a mí mismo y por no respetar el templo de tu Espíritu Santo. Hoy vengo con mi corazón rendido a ti mi Señor, para entronarte en mi vida y hacer tu voluntad, y no la mía. Te pido que entres a mi corazón y hagas de el un corazón puro y limpio como el tuyo mi Dios.
Señor Jesús, te pido que me perdones por todos mis pecados, ofensas y transgresiones, que me limpies con tu preciosísima sangre. Rodeame de tu luz y penetra en las profundidades de mi ser con tu amor. No dejes que ninguna zona de tinieblas permanezca en mí, sino transforma todo mi ser con la luz sanadora de tu infinito amor. Gracias por perdonarme mi Señor, recibo de tu perdón y me comprometo a servirte, y caminar en veredas de justicia. En el nombre de Jesús amen.
