Santo Domingo de la Calzada, conocido en la Iglesia católica como Santo Domingo de la Calzada, fue un religioso español que se encargó de impulsar el Camino de Santiago.
Nació en Viloria de Rioja, provincia de Burgos, en el año 1019. Pertenecía a una humilde familia de la región.
Luego de la muerte de sus padres, el pequeño Domingo se dedicó a pastorear las ovejas. Un día, mientras trabajaba en el campo, escuchó la voz de Dios y se convenció de que dedicaría su vida al Señor.
Quiso entrar en el monasterio de San Millán de la Cogolla, pero desafortunadamente no fue admitido. De igual manera, lo intentó en el monasterio de Santa María de Valvanera; sin embargo, sucedió lo mismo.
Por esa razón, se dedicó a llevar una vida eremítica en el bosque. Eso sí, jamás perdió su fe en Dios.
En 1039, comenzó a colaborar con Gregorio, obispo de Ostia, quien poco después lo ordenó sacerdote.
En esa época, los dos se encargaron de realizar muchas obras sociales e incluso construyeron un famoso puente de madera sobre el río Oja, el cual todavía se mantiene en pie.
En los años posteriores, otras personas se unieron a la causa de los dos religiosos y nació la ciudad de Santo Domingo de la Calzada. En ese tiempo, Domingo también se encargó de impulsar el Camino de Santiago, una peregrinación al sepulcro del célebre apóstol.
Murió el 12 de mayo de 1109 en la población que él mismo fundó. Sus restos mortales fueron enterrados en la iglesia del pueblo.
Luego de su muerte, se dice que realizó un gran número de milagros, tales como el exorcismo de un caballo francés o la curación de un peregrino alemán.
📅 ¿Cuando se celebra a Santo Domingo de la Calzada?
Su festividad se celebra el 12 de mayo y es el patrono de la Escuela de Ingenieros de Caminos, Canales y Puertos de Madrid.
🙏 Oración a Santo Domingo de la Calzada🙏
Santo Padre Domingo, llamado desde siempre «Luz de la Iglesia» y «Maestro de la Verdad», con gran confianza nos dirigimos a ti. Te rogamos nos obtengas la gracia de comprender la voluntad del Señor, la fuerza de seguir sus caminos, dejándonos guiar por la Sabiduría que viene de los alto y la serenidad del espíritu, que sólo en Dios puede encontrar su paz. Te confiamos a todos los que se han alejado de la Iglesia que puedan recuperar la luz de la fe, el consuelo de la esperanza y la alegría del amor que se nos da. Intercede sobre todo por los jóvenes, que encuentren en Cristo el modelo ideal del hombre nuevo y en su Evangelio la luz que orienta en el camino de la vida. Confiamos en tu ayuda, Santo Padre Domingo, y en la de los intercesores de la Orden que la Providencia ha querido para un servicio de «caridad en la verdad» en beneficio de toda la humanidad. Amén
